Nunca se vio en mucho tiempo tal cúmulo de estupidez,perversión,insensibilidad y falta de escrúpulos como los ahora vividos,por no hablar del continuo pisoteo de los Derechos Humanos de inocentes.
Lo de siempre,es normal,habitual,de que escandalizarse.Pues precisamente por eso,porque estamos convirtiendo las anomalías en bienes de uso cotidiano.
Aplauden a los corruptos,y les votan.
Jalean a la basura orgánica,la de órganos del Estado,y les apoyan.
Se les cae la baba con el deplorable espectáculo de la indecencia en directo,y no apagan la tv.
Cuando llega un ramalazo a lo bestia de todas estas desgracias,siempre me refugio en lo mismo,los Imprescindibles,las personas buenas,y los buenos ejemplos de dignidad y entereza.
No es la panancea universal,pero ayuda mucho a pasar el trago,y a lo mejor hasta se nos contagia algo.
Buenas noches y buena suerte
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