En estos días se cruzan en los informativos de papel e imagen,varias noticias que ,cruzadas,dan pie a comentarios diversos.
Una de las más importantes,el fallecimiento del Dr. Durand,al que llaman filósofo del simbolismo.No tengo muy claro que este sea el término adecuado,pero si que es uno de los máximos exponentes del estudio del valor de lo simbólico en la mente humana.
Dentro de la pléyade de sabios que han hecho un trabajo recopilatorio realmente ingente sobre este tema,me permito citar al gran Mircea Eliade,José Gómez Caffarena y,una obra singular,escrita en China allá por el siglo XVI-XVII,se trata de una novela titulada"El viaje a Occidente del rey mono",donde a través de un largo viaje se contrasta e interpreta la símbologia del imperio chino,sus tradiciones,con el mundo exterior que ya se atisba.
Los dos primeros autores escribieron un compendio, dificilmente superable, de tradición,símbolo y religión.Del tercer libro,se puede decir que supone un singular resumen de la realidad de uno de los grandes imperios del mundo.
Su punto de encuentro es el análisis del peso del elemento simbólico en nuestra herencia.
en términos antropológicos,se puede decir que el elemento simbólico ha tenido una larga y exitosa carrera.
La cuestión presente es el como salir de una vez de esta rueda.Hemos caminado mucho,pero apenas hemos avanzado,apenas estamos en el umbral de la caverna.
Sonidos e imagen debieron de constituir los primeros elementos simbólicos de auténtico peso.
Traducido,lenguaje,música en todas sus manifestaciones.Imagen,pintura,escultura,todo tipo de medios audiovisuales.Todos ellos garantizan el continuismo del poder como forma de control de vidas y haciendas.
Han pasado cientos de miles de años,pero ahí continuamos,presos de nuestra cultura colectiva,dependientes,sin libertad.
Magnificando carencias y convirtiéndolas en el elemento más básico del entramado de los vericuetos sociales.
Se ha recorrido una larga senda,sembrada de cadáveres.
El otro elemento determinante del poder es el miedo,y aquí tenemos una larga exposición de lo que ambos,juntos,han llegado a rebajar a la especie humana.
Una coda importante en este trayecto la constituye la escritura.Existen libros míticos,legendarios, desde época temprana,unos cuatro mil años antes de Cristo.Pero,indudablemente,el gran éxito de este apartado es la Biblia,seguida por judíos,cristianos y sus sectas,además de musulmanes.
En función de sus interpretaciones hemos sido víctimas de las mayores masacres de la historia,y en ello continuamos.
Del control torticero del elemento religioso,la mayor campaña de imagen de la historia,dicho anteriormente,han nacido las grandes corrientes de intolerancia de nuestro mundo.Estoy generalizando,no olvido las múltiples derivas que se han producido en diversas culturas,así como las benéficas consecuencias de alguna de ellas,pocas,cierto es,pero reales.
De la mixtificación de estas corrientes,en medio de la debacle civilizatoria que vivimos,cabe destacar el papel de lo que me es más cercano,Occidente y Oriente Medio.
Nuestra cuna es Africa,pero nuestra singladura nos ha llevado mucho más lejos desde aquellos años.
Miremos hacia donde miremos,me sigue pareciendo fascinante la pervivencia de símbolos diversos,cruces,espirales,cultos solares,sacrificios rituales,recuerdo de nuestro común origen.
Aquí y ahora,se sigue sacrificando a los inocentes en el altar de los intereses más bajos y rastreros que en el mundo han sido.
Los medios audiovisuales se han convertido,no solo en el espectáculo de la muerte en directo,también en aquello de que el medio es el mensaje.
La aldea global ha degenerado en la cárcel mundial,donde una serie de guardianes intentan perpetuar el poder de aquellos antiguos gobernantes que,en afortunadísimo cónclave con el elemento religioso,nos zarandean a su gusto y manera.
Pero no,mejor decir,nos han zarandeado.
El lamentable espectáculo del gobierno británico,aferrado desesperadamente a sus antiguos privilegios,da risa si no fuese dramático para muchos.
Intentan que sigamos su paso los mismos que tan activos fascistas fueron en la post guerra mundial.Demandan,desde una monarquía caduca y polvorienta,amén de sobrepasada,privilegios que ni son suyos ni estamos dispuestos a perpetuarlos.
No sentiremos muy bien si de una vez por todas se marchan de Europa,cosa que muy probablemente harán en fecha próxima.Eso, o renunciar a guardar en sus sótanos el dinero del crimen y el tráfico criminal mundial.
Como piratas es preciso reconocer que fueron de primera,de ahí la comodidad con la que se mueven en aguas turbias,pero tempus fugit,o dicho de forma castiza,a cada cerdo le llega su San Martín.
Hasta antes de ayer,seguían considerando a Norteamérica la hermana tonta a la que gobernar.
No se dan cuenta de la deriva de los continentes,de los flujos económicos y del hartazgo que producen.
De los muchos elementos simbólicos exitosos durante muchos siglos,la monarquía es sin dudarlo uno de los más prósperos.No sé si el emperador Teodosio era muy consciente de lo que hacía cuando decretó que el cristianismo fuese la religión del imperio.Seguramente atendía a al aquí y ahora que garantizace una cierta estabilidad social,además del apoyo de un estamento ya muy influyente,los cristianos.
Pero lo que si se puede afirmar es que de aquel maridaje surgió un mundo nuevo enfermo desde sus orígenes,que ha dado lugar a una concatenación inmensa de injusticias,abusos y muerte.
Los símbolos en estos siglos han sido básicos para la eficacia de ese control,el miedo,también.
Que la monarquía es un elemento ampliamente superado es evidente,el principio universal de la igualdad de todos ante la ley,no solo la descalifica automáticamente,también la excluye de cualquier tratado de equidad y justicia.
No sé a que esperamos ,aquí,en España,para comenzar el debate del cambio constitucional,no solo en lo referente a la forma de gobierno,sino también a las nuevas normas por las que se ha de regir este país,que incluye una reforma del sistema electoral,un avance en federalismo y una república .Como seguidora de la república,me siento en la obligación de insistir una y otra vez en la necesidad urgente de estos cambios.
A un nuevo mundo,formas nuevas.
En estos tiempos de intereses periclitados,economías emergentes y cambios evidentes de ciclos vitales,no deja de llamar la atención,como clara exposición del poder más casposo e indeseable,los decretos que saca el gobierno español un día si y otro también.
Son muchos y variados,prácticamente todos inconstitucionales,contra derecho.Pero ya se sabe que el Estado tiene la legitimación de la violencia.Algo altamente cuestionable,al decir de Locke,en determinados casos.
Que pretendan obligarnos a identificarnos si llevamos batas blancas,si vamos en manifestación pacífica o si demandamos,con derecho,nuestros intereses,los del bien común,a saber,el espíritu de la ley, es ilegal,inconstitucional y dictatorial.
Sin más,sin menos.
Los símblos están sobrepasados en esta etapa de nuestra historia,los que los representan de esta forma también.
Estudien, aprendan,y no nos arrastren en su torpe política de coacción facistoide.Tiene todas las de perder.
Ni callamos ni retrocedemos.
