Hace unos días hablaba con una amiga de la revolución necesaria en tiempos de crisis aguda.
Tema complejo.
Algunos dicen que la Revolución hoy no es posible.
No estoy de acuerdo,es posible y puede ser necesaria.
Hablamos de Revolución como de un prisma con muchas caras,según donde,según motivos,según qué medios,según con quién.
Europa,con el nacimiento de los Estados -Nación puso un límite a la violencia habitual,le dio la exclusividad de la violencia al Estado.Bueno si se hace con Justicia,malo si se ejercita de forma tiránica.
Hoy asistimos a muchos de los abusos que esa exclusividad ha supuesto para la población desde hace décadas,muchas décadas,en muchas latitudes.
Ya no puedes tener armas en casa,es ilegal,pero si te pueden moler a palos en una manifestación.
Entrenan a los medios de seguridad del Estado con técnicas nazis,se les adoctrina para ver al manifestante no como a un igual sino como a la alimaña a abatir.
Algo huele a podrido,hediondo y repugnante en esta sociedad que vivimos.
Y no son la mayoría de los ciudadanos,no son tampoco la mayoría de las fuerzas represoras.
Son una como especie de plaga social constituida en su mayoría por despreciables ratas que han tomado como fin el vivir de la explotación de propios y extraños,legitimados por la exclusividad de la violencia y la indefensión de la mayoría.
Lo que esta pasando en Madrid da una medida de hasta que punto se puede caer al abismo como ser humano y como partícipe social.
Las declaraciones de un consejero de sanidad que parece salido de la peor pesadilla dictatorial,avalado por Aguirres,González,Lasquettis y toda su corte de criminales,son un ejemplo fehaciente de lo afirmado.
Ya no podemos salir a la calle con picas y palas,pero si podemos hacerlo con el grito,la protesta continuada y la oposición a los mandatos y desafueros de esta chusma.
En un Estado-Nación,si no se cumplen las leyes,se anulan,se reescriben y se refunda el Estado en si.
Esto lo dijeron muchos durante siglos,personas a las que veneramos precisamente por esto,por lo que hicieron y dijeron.
Por si no se nota,hoy es un día de profunda ira.
Hoy asistimos a muchos de los abusos que esa exclusividad ha supuesto para la población desde hace décadas,muchas décadas,en muchas latitudes.
Ya no puedes tener armas en casa,es ilegal,pero si te pueden moler a palos en una manifestación.
Entrenan a los medios de seguridad del Estado con técnicas nazis,se les adoctrina para ver al manifestante no como a un igual sino como a la alimaña a abatir.
Algo huele a podrido,hediondo y repugnante en esta sociedad que vivimos.
Y no son la mayoría de los ciudadanos,no son tampoco la mayoría de las fuerzas represoras.
Son una como especie de plaga social constituida en su mayoría por despreciables ratas que han tomado como fin el vivir de la explotación de propios y extraños,legitimados por la exclusividad de la violencia y la indefensión de la mayoría.
Lo que esta pasando en Madrid da una medida de hasta que punto se puede caer al abismo como ser humano y como partícipe social.
Las declaraciones de un consejero de sanidad que parece salido de la peor pesadilla dictatorial,avalado por Aguirres,González,Lasquettis y toda su corte de criminales,son un ejemplo fehaciente de lo afirmado.
Ya no podemos salir a la calle con picas y palas,pero si podemos hacerlo con el grito,la protesta continuada y la oposición a los mandatos y desafueros de esta chusma.
En un Estado-Nación,si no se cumplen las leyes,se anulan,se reescriben y se refunda el Estado en si.
Esto lo dijeron muchos durante siglos,personas a las que veneramos precisamente por esto,por lo que hicieron y dijeron.
Por si no se nota,hoy es un día de profunda ira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario