En un magnífico artículo publicado el pasado día 9,Paul Krugman,Premio Nobel,otro maestro al que seguir,explicaba en que consiste el abismo fiscal.
Textualmente dice:"Resulta fácil confundirse con la cuestión fiscal,ya que todo el mundo habla del precipicio fiscal,De hecho,una encuesta reciente indica que una gran mayoría de los ciudadanos cree que el déficit presupuestario aumentará si caemos por ese precipicio.En la práctica,como no,es justo lo contrario:el peligro es que el déficit se reduzca en exceso y demasiado deprisa.Y los motivos por los que podría suceder esto son puramente políticos,podríamos estar a punto de recortar drásticamente el gasto y subir los impuestos no porque los mercados lo exijan,sino porque los republicanos han estado usando el chantaje como estrategia de negociación".
Esto viene al caso no solo como prueba máxima de divorcio entre ciudadanía y clase política,sino también como una evidencia paralela de la estrategia seguida aquí,en Europa,por los gobiernos de varios países,con Alemania a la cabeza.
No se atiende a la ciudadanía,tampoco a los intereses de la mayoría,se mira solamente a la conveniencia de unos mal llamados políticos,más atentos al pesebre en el que comen hoy que al mundo que resultará mañana.
Como el Dr.Krugman,espero y deseo que el Presidente Obama los ponga en su sitio.
En cuanto a esta parte del mundo,también.
Ya se oyen los tambores de las próximas campañas electorales en Alemania,Italia.Referendum en varios países.En una palabra,la chirimías anuncian un nuevo campo de batalla,y en ello están estos incapaces y mediocres políticos,en asegurarse el voto para seguir con más de lo mismo.
Y como continua explicando el Dr. Krugman,allí y aquí se dirime la cuestión de fondo del problema,la creación de empleo.
La ralentización de la peligrosa tendencia creada,la destrucción de empleo,el pase a carga muerta de una gran mayoría,pérdida de poder adquisitivo,marginación social, desánimo moral.
La frialdad,indiferencia y cinismo con la que la clase política trata los sentimientos de los ciudadanos es pavorosa,que viene de pavor,miedo incontrolable.
En su cretinismo,estas joyas parecen no ser conscientes de nuestro pasado reciente.De que la insubordinación a los mandatos injustos esta legitimada por la moral.Y,en este caso,de esto hablamos.
Ignoro hasta donde están dispuestos a llegar estos depredadores,pero creo poder afirmar que si esta claro hasta donde lo harán la mayor parte de los ciudadanos,donde me incluyo.
Estamos dispuestos a continuar trabajando por nuestros derechos,los elementales derechos humanos.Y también por nuestros deberes,aquellos que nos llevan a movilizarnos un día si y otro también por el bien común y el nacimiento de una nueva era de justicia y equidad.
Mientras,aquí seguiremos,en las barricadas morales que nos fortalecen y nos protejen de la carroña que intenta derribar nuestros principios.
A galopar...
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