MEDIO ORIENTE,LA TRAGEDIA INTERMINABLE

Cabe preguntarse,una vez más,quien estudia,diseña y decide sobre la política exterior de Estados Unidos respecto  a Medio Oriente.

Es difícil encontrar un cúmulo tal de equivocaciones, respecto a lo que es lo mejor para la zona en especial y el mundo en general.

Estados Unidos es un país joven, inmenso,construido de forma a menudo trágica.

Como tantas veces se ha escrito desde aquí,edificado en su mayoría con los supervivientes y excluidos de todo el mundo.

Esto lleva implícito un gran condicionante,su visión del mundo viene,llega,mayoritariamente  desde la tragedia.

Esto es,el complejo análisis que exige cualquier estudio político serio,esta mediatizado desde su origen por una situación extremadamente polivalente..

Pero hablar de todo esto es un debate largo y complicado,y entenderlo y asumirlo,aún más.

He leído con gran interés el artículo de David Levy,nuevo Presidente de U.S./ East-West Proyect,que se dedica a promover las posibles vías de diálogo y consecución de la paz en Medio Oriente.

Durante años seguí los espléndidos análisis del Dr.Henry Siegman,su enorme esfuerzo para la apertura de un diálogo constructivo .

Es de destacar y mucho el trabajo,riesgo y valor que supone el hacer propuestas de paz allí donde la guerra y la violencia ocupan lugar destacado desde hace siglos.

La Web común de los que nos implicamos en este diálogo desde hace decenios,se honra en seguir y participar de las propuestas que esta Fundación hace,en la vía de la consecución de una paz digna y equitativa para la Región.

¿Problemas?Todos y más.

No se extermina a la bestia del colonialismo salvaje,la explotación criminal y el abuso sistemático de un día para otro,ni en una década siquiera.

Pero si no lo intentamos reiteradamente los habitantes de aquellas tierras nunca conocerán lo que es vivir con dignidad y libertad para decidir.

Y sumado a sus tragedias,también han olvidado su Historia,su total historia,o esta vive recluida en los Centros de Estudio.
En este punto es necesario añadir que este es un mal consuetudinario a todos las civilizaciones,alentado por las conveniencias políticas de los depredadores del momento.Véase Gran Bretaña.

Posiblemente,de todos los conflictos que existen en el mundo,ninguno es más degradante que este,y sus tentáculos se han extendido hacía países lejos de su área geográfica,tal sucede con Africa.

Estados Unidos,un Gobierno fuerte,es el único que en algún momento rozó la posibilidad del cambio,y es el único que todavía puede llegar a conseguirlo.

Hace unos días leía un libro de un autor inglés sobre Civilización,Q.Clark.Habla de la Civilización, Occidental,busqué,lógicamente, en el Índice,Córdoba,no existe.

Es decir,uno de los vehículos principales de la cultura Occidental,el que trajeron los Omeya desde Medio Oriente,sencillamente,no existe.

Mi amigo Pedro Martínez Montávez,posiblemente el mayor especialista occidental del mundo islámico,cuando hablamos de la tragedia de la ignorancia respecto al origen de muchas realidades,me dice que es poco menos que imposible cambiar el rumbo,y cuando se intenta el esfuerzo es agotador.

Hablar de la Escuela de Traductoras de Toledo, es hacerlo del vehículo a través del que el saber del Mundo Antiguo pasó a las escasas Universidades de la Europa Medieval.

Tal como aprender sobre el Arte Clásico es desenterrar los abundantes restos de la ciudad de Roma,entonces capital del Papado.

La feliz unión del uno con lo otro generó la corriente del Renacimiento,fuente inagotable de saber y evolución.

Pero claro,en Occidente,al decir de muchos,esa herencia no existe,por acción u omisión.

Entonces no hay que extrañarse de que la antigua Colonia americana del por aquel entonces Imperio inglés,continue con las mismas lagunas,a falta de otros mimbres,o por ignorancia de la existencia de los tales.

Sería muy de agradecer,y ayudaría muchísimo a la concordia internacional,comenzar de una vez por todas a reescribir nuestra Historia,global y local.

De sabios es rectificar,y si ayuda a la causa de la Paz,directamente  es un milagro.