REFLEXIONES AL HILO DE MUERTES

Dicen que la patria es la infancia,una forma de sublimar conceptos caducos y periclitados.

No creo en patrias,ni banderas,ni en mafias diversas.

Creo en el ser humano como superación,creo en la esperanza como forma de superación,creo que el principio del caos,en sentido científico, demuestra por donde va la realidad,por más que intenten disfrazarla.

Toda esta declaración viene a cuento de varios sucesos aislados convergentes en estos días.

Como impenitente estudiosa de la Historia,especialidad dura donde las haya,la mayor evidencia que aprecias desde el Mundo Antiguo hasta hoy mismo,es la  sistemática destrucción vital a la que nos hemos dedicado desde nuestros orígenes.

En las contadas ocasiones en que los humanos no nos hemos dedicado al exterminio,entonces,como un milagro,han surgido momentos estelares que han permitido otear un paisaje insólito,porque se ve la salida a la rueda de la destrucción permanente.

Incluso,en medio de la tragedia,  cada tiempo aparecen figuras que nos recuerdan con su vida y ejemplo, que podemos levantarnos finalmente del barro en el que intentan hundirnos permanentemente.

Como  creo que la explicación es pertinente,diré que estudio Historia por la necesidad surgida de mi propia circunstancia vital,la de llenar veintisiete años de vida,comprender,que no aceptar,y entresacar algo positivo de la tragedia.

Comencé con la Antiguedad,continué hasta hoy.

La Historia es como una ingeniería,tienes que estar aprendiendo continuamente,porque surgen nuevos descubrimientos que hace variar la óptica de lo ya aprendido.

Pude elegir otra profesión,pero la necesidad de saber fue más fuerte que otras fuertes tendencias,como el Arte en todas sus formas.

Pero también llegué hasta ahí,porque el Arte es algo así como el escape del espíritu ante la vesania humana,lo que nos salva y en cierta forma contribuye a justificarnos.

Sin comprender los grandes flujos migratorios no entiendes las derivas económicas,tampoco puedes dar soluciones sensatas,adaptándolas al medio y la circunstancia.

La economía política es una de las grandes piedras angulares de nuestra vida,su buena o mala utilización explica de forma bastante aproximada nuestra realidad.

Aprecias con relativa facilidad los hilos conductores de las organizaciones humanas,sobre todo en lo negativo.

Evidencias el implacable marcaje de determinadas religiones en nuestro día a día.

Nunca se mató más ni mejor que en nombre de estos dos innobles trapos coloreados,economía,intereses económicos,y religión,no como aspiración del espíritu,sino como un mandoble más que atizar a la cabeza de los descreídos.

Hoy nada,casi nada, ha variado.

Abuso,mentira,salvajes asesinatos del cuerpo y la mente,como escribí tantas veces,son crímenes totales,sin excusa.

Como persona pensante no puedo aceptar la violencia como forma de imposición,aunque admito que si sería capaz de tomar las armas si hubiese de defender mi vida o la de otros,paradoja cruel de nuestros genes.

En este país,España, acaba de materializarse una nueva forma de hacer política,la tan reclamada y deseada  Democracia Participativa.

Los de siempre,esos que se creen con derecho a dirigir nuestras vidas,ya están poniendo troncos en las ruedas,lo que sea y como sea con tal de entorpecer la andadura.Olvidan que en medio de tanta obscuridad siempre han existido esos albores esperanzadores.

Ahora es más fácil,la comunicación corre.Más difícil,se paga mucho por manipularla.

En medio,nosotros,intentando separar permanentemente el trigo de la paja.

Las asambleas ciudadanas son un gran instrumento,siempre y cuando se utilicen con cabeza,con sensatez.

En esto ayuda mucho el conocimiento de nuestro pasado.Intentar ser objetivos es misión imposible,pero acercarse un poco si lo es,delimitando bien las líneas que separan lo positivo de lo negativo y de lo peor.Otra tarea ingente.

Anoche no dejaba de pensar en esas mujeres que día a día acuden a los pasos fronterizos en Israel,su trabajo es asegurar unas mínimas garantías para los trabajadores palestinos que cada día  los atraviesan  para ir a trabajar al lado israelí.Las humillan,maltratan,ellas son israelíes,pero día a día allí están,dando testimonio de una injusticia palmaria.

Estos aparentemente pequeños actos son los que marcan la diferencia en las escalas humanas.Solidaridad con mayúscula.

Las grandes revoluciones no comienzan con grandes ejércitos marchando por la llanura,comienzan así,con los pequeños actos que suman y suman hasta llegar a desviar el eje rotatorio.

Hace dos días, en Madrid, se produjeron dos hechos llamativos,la divulgación de unos comentarios más que indeseables,de los que no prescriben,y el intento de poner en la picota a otra persona por manifestarse abiertamente contra la manipulación de la religión en el ámbito universitario.

Respecto al primero ya escribí,y otros lo han hecho mucho mejor que yo.No puedo aceptar chiste de la desgracia humana con nombre y apellido,es como volver a matarlos.

Respecto de lo segundo,me parece encomiable,especialmente en este país,manifestarse abiertamente contra la manipulación torticera del hecho religioso,ya se hizo bastante mal,no insistan,otros tiempos,el suyo ya pasó.

Si aconsejaría a estos movimientos recién nacidos que afinen mucho,que no den cuartos al pregonero,la estrategia de la caverna,ya que clientelismo y manipulación decaen,es calumniar y desacreditar,si se les da una buena excusa,miel sobre hojuelas.

Entremedias,allí y aquí,los miserables de turno ningunean,manipulan y demonizan esos hechos en los que ellos son grandes maestros.

A unos y otros hay que decirles que su tiempo pasó,que como hacía la Maga Circe,sus cuerpos se están convirtiendo paulatinamente en animales,y cuando el cambio sea completo no habrá héroe que acuda a su rescate,se construirán cercas,vallas para mantenerlos en sus cochiqueras,a fin de que los demás podamos pasar al siguiente estadio vital,el de la navegación por aguas más propicias hacia un horizonte más abierto para todos.

Últimamente escribo poco,prefiero leer,produce un atisbo de depresión lo que sucede en el mundo pero,otra enseñanza histórica,el camino es el fin en si mismo,puedes descansar,sentarte un rato y comer algo,disfrutar del paisaje,o no,pero no parar.